Ser bombero voluntario significa tener la virtud de proteger y entregarse al otro

Argentina, 29 de Septiembre de 2015
Nota: ellitoral.com

02-06-2013 Corrientes. -HORACIO BURGOA, PRESIDENTE DE LA ASOCIACION LOCAL. Por el Día del Bombero Voluntario, el titular de la institución reflexionó sobre su rol en la sociedad.


HORACIO BURGOA, PRESIDENTE DE LA ASOCIACION LOCAL
El presidente de la Asociación de Bomberos Voluntarios de Capital desde 1998, Horacio Burgoa, destacó la importancia del trabajo de la institución haciendo principal hincapié en los aspectos esenciales para ser parte del cuerpo.

Entre los requisitos puntualizó las cualidades necesarias para llevar a cabo las diversas actividades  como lo son la vocación de entrega y servicio a la comunidad que actualmente llevan adelante los 18 miembros que  desempañan sus funciones en la delegación capitalina.

Además detalló las diversas labores que realizan en la ciudad y la cantidad de vidas salvadas por una organización que hoy conmemora una fecha especial. Sobre el final instó a los jóvenes a unirse al cuerpo de bomberos voluntarios.

Asimismo, destacó la virtud de entrega desinteresada que diariamente llevan a cabo sin recibir ninguna remuneración.
Con la experiencia cosechada en la función que desarrolló y en la que cumple actualmente,

¿qué significa para usted ser un 
bombero voluntario?


Ser bombero voluntario significa tener la virtud de proteger y entregarse al otro.

El bombero voluntario deja su hogar y no sabe si regresa, se han dado muchos casos donde han muerto y a su hogar jamás regresaron, es lo más triste. Además este no es un trabajo pago sino voluntario. El bombero siempre da, nunca pide. Poseer eso significa tener una vocación que no todos los tienen para realizar este tipo de trabajos.

En su caso particular, ¿cómo inició a materializar esa vocación que incluye muchos sacrificios personales?

Yo vengo de una familia con vocación militar y mi debut como voluntario fue durante el terremoto en San Juan en el año 1945. Tenía 15 años y en ese momento trabajamos como rescatistas con los Boy Scouts y hoy continúo a mis 82 años. No como bombero propiamente dicho sino como encargado. Mi misión es trabajar para mejorar a la institución y colaborar con la sociedad.

 Al ser una actividad no remunerada los ingresos son a través de las donaciones, pero ¿hoy en día la gente dona para la institución?

Bueno, actualmente el espíritu solidario está muy dejado de lado. Es algo que no comprendo, inclusive cuando un promotor pide donaciones en una casa nos llaman al cuartel para averiguar si es cierto lamentablemente.

¿Cree usted que actualmente en la ciudad existen más problemas, llámense descuidos o negligencias de las personas que ocasionan situaciones donde los bomberos deben intervenir?

En primer lugar, a nivel nacional han criticado mucho a nuestra institución por los trabajos de rescate, porque se considera que los bomberos sólo deben apagar incendios.

Sin embargo, debido al crecimiento del parque automotor que es extraordinario, la necesidad del trabajo de los bomberos voluntarios en ruta es imprescindible, como institución cubrimos más del 85% de las rutas para trabajos de rescates y salvatajes. En este sentido importa mucho la educación de la gente: antes podíamos desplazarnos más velozmente por la ciudad, hoy en día, con el caos vehicular, se vuelve más complicado. Incluso hay gente que ni siquiera respeta las sirenas y entorpecen los procedimientos.

En cuanto a sus labores en la ciudad en sí, ¿llevan una estadística de los casos atendidos y de las personas socorridas?

En lo que sea Capital propiamente dicha, haciendo una estadística sintética, nosotros tenemos desde 1998 a febrero de 2013 más de 40 mil víctimas socorridas con vida. De esa cantidad, 11.900 fueron atendidas en accidentes de tránsito y 3.598 en incendios.

Pese a ello, por una cuestión de conceptos, la Federación Nacional de Bomberos consideran que nuestro trabajo no es valedero porque no son incendios forestales, donde se pierde más económicamente.

Pero de todas formas las pérdidas en viviendas no son pocas. Mientras que los incendios del interior deben ser tratados por los bomberos de su jurisdicción, sin embargo hemos acudido a lugares más lejanos a la ciudad que sobrepasan nuestra jurisdicción y es gracias a que tenemos personal y elementos en condiciones.

Por otro lado, en lo que va del primer trimestre de 2013 ya se han atendido a 298 víctimas de accidentes.

¿Cuántos incendios han atendido en lo que va del año?

Gracias a Dios no se han producido muchos incendios de altura, que son los que se ocasionan en edificios. Los mismos se producen más en casas precarias, salvo casos puntuales como grandes comercios que también se han incendiado.

¿Me podría resumir un día normal de un bombero voluntario?

Hay un orden: los trabajos están distribuidos en tres turnos de ocho horas cada uno, de 7 a 14, de 14 a 22 y de 22 a 7. Durante la noche se cumple con una dotación mínima de personal para cumplir con las posibles emergencias que puedan surgir.

Tenemos un plantel móvil de 18 personas pero no todos están supeditados a cumplir todo el horario, como aquellos que tienen otros compromisos, profesiones o que trabajan en sus horas libres o fines de semana. Aquellos que no tienen obligaciones están más tiempo. Incluso la gente que entra a las 22 come y duerme en la delegación. Siempre estamos en guardia permanente. 

¿Cómo hace una persona para ingresar al cuerpo de bomberos voluntarios?

Primero se le debe poner en conocimiento de cuáles son las condiciones elementales; constancia de domicilio, certificado de buena salud y DNI. Cabe destacar que no deben ser mayor de edad, incluso nosotros tenemos un cadete que tiene 12 años el cual opera la radio, se entrena pero no sale a los procedimientos en la calle.

Una vez que alguien ingresa, ¿necesita llevar a cabo algún curso o entrenamiento particular?
Sí, además preferimos en la medida de lo posible que ingresen varias personas juntas, así se les imparte a todos las capacitaciones.

Por la tarde se realiza la práctica de terreno como lo llamamos, se bajan las herramientas del camión y se trabaja con los cadetes, ya que deben conocer el equipamiento y los procedimientos a realizar.
Hay que destacar que durante la noche también se hacen capacitaciones tanto teóricas como prácticas.

El período de reclutamiento dura seis meses y se le otorga el certificado de bomberos.


Además de sus trabajos específicos, ¿realizan otro tipo de actividades?

Tenemos una revista que se publica de forma anual, cada día del voluntario. Si bien este año no pudimos, en la publicación hablamos de los cambios climatológicos, damos consejos y capacitaciones. También realizamos charlas en las escuelas en materia de prevención y concientización sobre la seguridad vial, llevada adelante por la academia de la institución.

¿Alguna reflexión final que desee realizar por el Día del Bombero Voluntario?

Nuestra institución merece respeto, es lo único que reclamo porque hay mucho desentendimiento entre las fuerzas de seguridad y nosotros. También instamos a la juventud a que se acerque al cuerpo y piensen en realizar una pasantía o incorporarse al cuerpo.  

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