En Mendoza, los casos de ira al volante se multiplican y se maneja cada vez más con irritación

Mendoza, 27 de Julio de 2013
Nota: Diario UNO y R.J.A.

Según un especialista, el 72% de los conductores maneja con irritación y de ese total, el20% padece un nivel de ira tan alto que no reacciona adecuadamente y son propensos a generar graves accidentes.



Mendoza es una de las principales metrópolis del país y con una plaza automotriz saturada, la paciencia se agota y los casos de “ira al volante” se multiplican. Según el doctor Aldo Merlino, creador del Índice de Ira al Conducir (IRAC), el 52% maneja con síntomas de irritación y otro 20% lo hace con un nivel de irascibilidad tan elevado que no reacciona adecuadamente y son principales responsables de accidentes que, de haber mantenido la calma, no hubiesen ocurrido.
 


¡Movete, hijo de p...!
Es la primera vez que Mendoza es sometida a un relevamiento que estudia a los conductores y sus cada vez más reiterados exabruptos provocados por la cólera en las calles.

Los ejemplos abundan en el microcentro mendocino. Cada vez hay más unidades puestas en arterias que no soportan la densidad automotriz y en consecuencia generan irritabilidad, que muchas veces se traduce en accidentes graves. De acuerdo al informe, la falta más grave y la que genera más episodios de muerte a raíz de la ira es pasar autos por donde no se debe. Por ejemplo, durante un embotellamiento, el conductor que no puede controlar su bronca, cansado de esperar, intenta superar por la derecha o por la banquina a los otros autos sin tomar conciencia de que por esos carriles la muerte propia y ajena está latente.

Muchas veces, ese enojo se materializa en señas, insultos y bocinazos, pero muchas otras son el origen de importantes incidentes viales.

Por otro lado, además de mostrar que alrededor del 52% de los conductores maneja con síntomas de irritación, el índice creado por el investigador para medir la ira al volante revela que casi un 20% conduce con un nivel de irascibilidad demasiado alto como para reaccionar de manera adecuada ante el menor imprevisto, tenga o no razón.

Este grado de irritabilidad que tiene una persona, según pudo comprobar Merlino, estaría asociado con la predisposición individual a no cumplir las normas de tránsito y agredir a otros conductores y transeúntes. “Los resultados nos muestran una triste realidad: la irascibilidad está muy presente en las calles, por lo menos en las grandes ciudades de la Argentina", explicó a Diario El Ciudadano el investigador, que actualmente dirige la Secretaría de Investigación de la Universidad Siglo 21, en Córdoba.
 


Controlá tu ira
Por estos días, la ira, la agresividad y las reacciones violentas que solemos experimentar mientras manejamos son cada vez más frecuentes y según recientes estudios, tienden a aumentar. Estos hábitos se incorporan durante los viajes que los niños realizan en el asiento trasero, cuando observan la forma en que sus padres, como conductores, se comportan y reaccionan frente a variadas circunstancias. Pero hay que tener en cuenta que esos modos de conducta no sólo distorsionan la apreciación de lo que es realmente peligroso, sino también inculcan en los chicos un modelo agresivo de conducción como norma.

Hoy cada vez es más habitual escuchar hablar del road rage (ira en los caminos), concepto que explica la conducta violenta y agresiva de ciertos conductores hacia otros pares. Existen diferentes grados de ese tipo de conducta y son conocidos los casos donde un conductor es capaz de perseguir a otro por cuadras, enfurecido, para hacerle notar un error que cometió.



Una reacción así puede terminar en un simple intercambio verbal, pero también hasta en una pelea con armas.

Existen técnicas que sirven para controlar y dominar efectivamente las emociones frente al volante, pero, bien vale resaltarlo, también es necesario un cambio de actitud.

Los conductores dependen fuertemente unos de otros para coordinar sus acciones. Responder de manera emocionalmente inteligente ayudará a reflexionar sobre las limitaciones y reconocer los puntos débiles. Una capacitación adecuada en este sentido puede contribuir efectivamente a evitar el flagelo de la ira en los caminos.



Enlace:
http://www.diariouno.com.ar/mendoza/En-Mendoza-los-casos-de-ira-al-volante-se-multiplican-y-se-maneja-cada-vez-mas-con-irritacion--20130726-0100.html